El CSIF considera que el Gobierno tendrá que adoptar más medidas anti déficit
Santiago de Compostela, 3 jun (EFE).- El presidente nacional de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Domingo Fernández, aseguró hoy que el Gobierno deberá adoptar en breve nuevas medidas para reducir el déficit público y dijo que las adoptadas hasta ahora son de "eficacia limitada".
En rueda de prensa y tras participar en Santiago en la apertura de unas jornadas que organiza su sindicato sobre la función pública, Fernández criticó la reducción salarial de un 5% que se aplicará a los empleados públicos y emplazó al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero a "mirar para otro sitio", en caso de verse obligado a adoptar nuevas medidas para rebajar el déficit.
El portavoz de CSIF valoró el empleo público y dijo que "defendiendo nuestra situación laboral estamos también defendiendo los servicios públicos, algo básico en un Estado social, que no es lo mismo que un Estado socialista".
Fernández consideró que la administración pública española es "vieja" y "atrasada" y que no se ha adaptado aún al actual Estado de las autonomías. "A lo mejor no se pueden mantener tantas administraciones duplicando servicios", comentó.
El sindicalista criticó, no sólo la rebaja del 5% de los salarios de los funcionarios, sino también la medida en que va a ser aplicado el decreto, al considerar que "no sólo reduce el déficit a costa de nuestros modestos salarios", sino que su aplicación "va a producir un caos y un agravio comparativo entre las administraciones".
Así, indicó que el Decreto del Gobierno modifica por primera vez la proporcionalidad salarial, "que siempre existió", dijo, y añadió que entre las medidas adoptadas por el Gobierno "se aplica una progresividad que trata los modestos sueldos como si fueran impuestos".
Domingo Fernández calificó de "muy grave" que, con la aplicación del Decreto, las retribuciones complementarias de los funcionarios "van a depender de lo que decida cada Comunidad autónoma o cada Ayuntamiento".
Explicó que de los aproximadamente 2.600.000 empleados públicos que hay en España más de 2 millones dependen directamente de las Comunidades autónomas o de los Ayuntamientos.
Ante esta situación, señaló que "los agravios que ya existían se van a agravar", y dijo no entender que funcionarios que realizan un mismo trabajo perciban diferentes salarios en función de la Comunidad autónoma donde lo desempeñe.
Fernández abogó por reducir el gasto público en conceptos que dependen de las administraciones autonómicas o locales en vez de hacerlo directamente sobre los salarios de los empleados.
Entre otras medidas de ahorro, el presidente nacional del CISF citó la disminución de altos cargos o de personal de confianza de la administración y de las empresas públicas, "que es donde verdaderamente está el gran agujero", sentenció.
Por su parte, el presidente de CSIF en Galicia, José Francisco Méndez Castro, presente también en la rueda de prensa, afirmó que la actual crisis económica es consecuencia del enorme endeudamiento del sector privado español. "El Estado español como tal Estado no está endeudado, quien está endeudado son las familias españolas y la banca", aseveró.
Dijo que los empleados públicos "aparecemos como los chivos expiatorios de todos los males de este país". "Resulta que ahora tenemos que justificarnos por tener un puesto de trabajo estable, que es lo único que garantiza los derechos ciudadanos en las sociedades democráticas, y ahora resulta que eso es delito". EFE.
Santiago de Compostela, 3 jun (EFE).- El presidente nacional de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Domingo Fernández, aseguró hoy que el Gobierno deberá adoptar en breve nuevas medidas para reducir el déficit público y dijo que las adoptadas hasta ahora son de "eficacia limitada".
En rueda de prensa y tras participar en Santiago en la apertura de unas jornadas que organiza su sindicato sobre la función pública, Fernández criticó la reducción salarial de un 5% que se aplicará a los empleados públicos y emplazó al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero a "mirar para otro sitio", en caso de verse obligado a adoptar nuevas medidas para rebajar el déficit.
El portavoz de CSIF valoró el empleo público y dijo que "defendiendo nuestra situación laboral estamos también defendiendo los servicios públicos, algo básico en un Estado social, que no es lo mismo que un Estado socialista".
Fernández consideró que la administración pública española es "vieja" y "atrasada" y que no se ha adaptado aún al actual Estado de las autonomías. "A lo mejor no se pueden mantener tantas administraciones duplicando servicios", comentó.
El sindicalista criticó, no sólo la rebaja del 5% de los salarios de los funcionarios, sino también la medida en que va a ser aplicado el decreto, al considerar que "no sólo reduce el déficit a costa de nuestros modestos salarios", sino que su aplicación "va a producir un caos y un agravio comparativo entre las administraciones".
Así, indicó que el Decreto del Gobierno modifica por primera vez la proporcionalidad salarial, "que siempre existió", dijo, y añadió que entre las medidas adoptadas por el Gobierno "se aplica una progresividad que trata los modestos sueldos como si fueran impuestos".
Domingo Fernández calificó de "muy grave" que, con la aplicación del Decreto, las retribuciones complementarias de los funcionarios "van a depender de lo que decida cada Comunidad autónoma o cada Ayuntamiento".
Explicó que de los aproximadamente 2.600.000 empleados públicos que hay en España más de 2 millones dependen directamente de las Comunidades autónomas o de los Ayuntamientos.
Ante esta situación, señaló que "los agravios que ya existían se van a agravar", y dijo no entender que funcionarios que realizan un mismo trabajo perciban diferentes salarios en función de la Comunidad autónoma donde lo desempeñe.
Fernández abogó por reducir el gasto público en conceptos que dependen de las administraciones autonómicas o locales en vez de hacerlo directamente sobre los salarios de los empleados.
Entre otras medidas de ahorro, el presidente nacional del CISF citó la disminución de altos cargos o de personal de confianza de la administración y de las empresas públicas, "que es donde verdaderamente está el gran agujero", sentenció.
Por su parte, el presidente de CSIF en Galicia, José Francisco Méndez Castro, presente también en la rueda de prensa, afirmó que la actual crisis económica es consecuencia del enorme endeudamiento del sector privado español. "El Estado español como tal Estado no está endeudado, quien está endeudado son las familias españolas y la banca", aseveró.
Dijo que los empleados públicos "aparecemos como los chivos expiatorios de todos los males de este país". "Resulta que ahora tenemos que justificarnos por tener un puesto de trabajo estable, que es lo único que garantiza los derechos ciudadanos en las sociedades democráticas, y ahora resulta que eso es delito". EFE.
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