Funcionarios de prisiones y representantes sindicales se concentraron a las puertas del centro penitenciario del Acebuche, en Almería, para reclamar a la dirección general de Instituciones Penitenciarias que destine más medios a una prisión que definieron como "la más infradotada" de Andalucía.
Así lo manifestó el presidente provincial de CSI-CSIF, Francisco Iglesias, después de que, desde las 12.30 horas, representantes de ACAIP, CCOO, CSI-CSIF y UGT, se reuniesen en el lugar, donde impidieron el acceso al centro durante al menos una hora.
Las principales quejas por parte de los sindicatos se centran en la masificación del centro penitenciario y en la falta de medios tanto materiales como personales destinados al mismo.
Seis metros cuadrados
Sobre el primer aspecto, Iglesias criticó el hecho de que el Acebuche sea la "única prisión" andaluza en la que tres internos "se ven obligados" a convivir en celdas que no alcanzan los seis metros cuadrados de superficie, situación que "crispa los ánimos de los reclusos" e impide a los funcionarios desarrollar sus labores en pro de la reinserción social de los mismos.
Enfatizó que el centro penitenciario de Almería es el que "menos condiciones reúne" de toda Andalucía "y uno de los más obsoletos" del sistema penitenciario español.
Para ejemplificar esta aseveración Iglesias explicó que, mientras que la mayoría de centros andaluces están dotados de sistemas de vídeo vigilancia o de apertura informatizada de puertas, en el almeriense "pervive el cerrojazo, más propio de las cárceles de la Guerra Civil que del año 2007".
A esta "carencia de medios técnicos" se añade según Iglesias la falta de personal puesto que, en los meses de verano, 130 internos quedan bajo supervisión de un único funcionario, cuando "lo normal" es destinar cuatro o cinco trabajadores por cada 120 internos.
Iglesias, quien reclamó a la dirección general de Instituciones Penitenciarias que asuma "de inmediato" los compromisos adquiridos en 2006 para paliar los citados déficit, acusó a la directora del centro penitenciario, Clotilde Berzosa, de no permitir que a la protesta se sumara el grueso de los trabajadores de la prisión.
Responsabilidades
En este sentido, manifestó su intención de solicitar tanto a la Subdelegación del Gobierno como a Instituciones Penitenciarias que ésta "asuma responsabilidades" al "impedir a los trabajadores" ejercer su derecho a secundar la concentración.
El responsable provincial de CSI-CSIF afirmó que las concentraciones a las puertas del centro penitenciario se repetirán todos los miércoles de este mes para que la provincia de Almería "deje de ser la gran olvidada" del sistema penitenciario español.
Así lo manifestó el presidente provincial de CSI-CSIF, Francisco Iglesias, después de que, desde las 12.30 horas, representantes de ACAIP, CCOO, CSI-CSIF y UGT, se reuniesen en el lugar, donde impidieron el acceso al centro durante al menos una hora.
Las principales quejas por parte de los sindicatos se centran en la masificación del centro penitenciario y en la falta de medios tanto materiales como personales destinados al mismo.
Seis metros cuadrados
Sobre el primer aspecto, Iglesias criticó el hecho de que el Acebuche sea la "única prisión" andaluza en la que tres internos "se ven obligados" a convivir en celdas que no alcanzan los seis metros cuadrados de superficie, situación que "crispa los ánimos de los reclusos" e impide a los funcionarios desarrollar sus labores en pro de la reinserción social de los mismos.
Enfatizó que el centro penitenciario de Almería es el que "menos condiciones reúne" de toda Andalucía "y uno de los más obsoletos" del sistema penitenciario español.
Para ejemplificar esta aseveración Iglesias explicó que, mientras que la mayoría de centros andaluces están dotados de sistemas de vídeo vigilancia o de apertura informatizada de puertas, en el almeriense "pervive el cerrojazo, más propio de las cárceles de la Guerra Civil que del año 2007".
A esta "carencia de medios técnicos" se añade según Iglesias la falta de personal puesto que, en los meses de verano, 130 internos quedan bajo supervisión de un único funcionario, cuando "lo normal" es destinar cuatro o cinco trabajadores por cada 120 internos.
Iglesias, quien reclamó a la dirección general de Instituciones Penitenciarias que asuma "de inmediato" los compromisos adquiridos en 2006 para paliar los citados déficit, acusó a la directora del centro penitenciario, Clotilde Berzosa, de no permitir que a la protesta se sumara el grueso de los trabajadores de la prisión.
Responsabilidades
En este sentido, manifestó su intención de solicitar tanto a la Subdelegación del Gobierno como a Instituciones Penitenciarias que ésta "asuma responsabilidades" al "impedir a los trabajadores" ejercer su derecho a secundar la concentración.
El responsable provincial de CSI-CSIF afirmó que las concentraciones a las puertas del centro penitenciario se repetirán todos los miércoles de este mes para que la provincia de Almería "deje de ser la gran olvidada" del sistema penitenciario español.
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