Prisión de Castellón, CSI-CSIF denuncia.

Castellón.- CSI-CSIF advierte sobre el "aumento de la peligrosidad" en la prisión
CASTELLON. (EUROPA PRESS) -

La Sección Sindical de CSI-CSIF en el Centro Penitenciario de Castellón advirtió hoy en un comunicado que, a pesar del "optimismo" manifestado por la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, en su visita a la provincia hace unos días, en la prisión de Castellón "se ha registrado en los últimos meses un aumento de peligrosidad que tiene más que preocupados a los trabajadores de este centro".

Según CSI-CSIF, el centro penitenciario de Castellón se ha convertido en un "verdadero polvorín" que "puede estallar en cualquier momento". Según denunció, "no son extrañas las agresiones directas a funcionarios, así como entre internos, como las ocurridas hace tan sólo unos días en Castellón, que si no se han incrementado, ha sido por la actuación profesional y decidida de los trabajadores".

No obstante, el sindicato denunció que los funcionarios "se encuentran desprotegidos ante estas situaciones violentas", y lamentó que, "aún teniendo constancia del problema, desde la Dirección General no se pongan en marcha los mecanismos necesarios para atajar esta situación".

Para esta central sindical, una de las principales causas de este aumento de violencia es la "masificación" del centro penitenciario de Castellón. "No hay más que comprobar el balance de entradas y salidas de presos en el año 2006 para constatar la evolución de su población reclusa", indicó.

Según el sindicato, actualmente, la prisión de Castellón alberga cerca de 800 internos, habiendo sido diseñada para un máximo de 450. "Tanto es así, que hay celdas que acogen cerca de 10 personas, con los problemas que eso conlleva, vulnerando los derechos de la población interna", añadió.

No obstante, señaló, este aumento de reclusos "no ha venido acompañado de un aumento proporcional del número de funcionarios penitenciarios, que trabajan en condiciones precarias", y como ejemplo indicó que en los tres módulos grandes, con una ratio de 180 internos por módulo, tan sólo están de servicio dos trabajadores en cada uno.

Los funcionarios del centro penitenciario de Castellón se encuentran "desbordados" y reclaman un reconocimiento, ya no monetario, sino público de su labor, afirmó la central sindical.
"Somos trabajadores "escondidos" para la sociedad en las prisiones, pero con un alto nivel de preparación académica y con familias cuya preocupación, en muchas ocasiones, no es si llegamos o no a fin de mes, sino si llegamos o no sin algún incidente más o menos grave en nuestras espaldas al final de la jornada laboral", señaló un funcionario de la prisión de Castellón.

ALBOCASSER

En cuanto al nuevo centro de Albocàsser, CSI-CSIF afirmó que "no va a terminar con la masificación y difícilmente la paliará". Al respecto, subrayó que "si se cumple la legislación y se respeta el derecho de los internos a residir en celdas individuales, la mayor parte de la capacidad de este centro, estimada en unos 1.300 internos, será copada por los excedentes de Picassent y de Castellón, con lo cual, la capacidad real de Albocàsser va a ser bastante más reducida que la prometida por la directora general de Instituciones Penitenciarias".

CSI-CSIF criticó la actitud mantenida por la Administración respecto a este problema, "común en todas las prisiones españolas". Para este sindicato, la solución "no se basa únicamente en crear nuevas prisiones, sino que es necesario trabajar para disminuir la delincuencia y el número de delincuentes".

Para ello, CSI-CSIF consideró "fundamental y necesario" diseñar un plan de choque "que abarcaría, por ejemplo, una mejor política de inmigración, ya que actualmente el 40 por ciento de la población reclusa es extranjera".

Por otra parte, también sería necesario, según el sindicato, adecuar las relaciones de puestos de trabajo de los centros penitenciarios a la situación actual y celebrar convocatorias extraordinarias de ofertas de plazas en las oposiciones anuales al Cuerpo de Ayudantes. "Cualquier cosa, menos que trabajemos los mismos con muchos más internos, que además no responden ya a un perfil clásico, sino a un perfil corregido y aumentado en cuanto a peligrosidad y dificultad", afirmó uno de los portavoces de CSI-CSIF.

Este sindicato no admite que la Administración ·"se escude echándole la culpa a anteriores etapas políticas". Para CSI-CSIF, "la Administración es una, independientemente de quien ostente el poder, y su obligación es la de solucionar los problemas existentes y no crear otros nuevos".